Para crecer hay que responsabilizarnos de nuestros actos, estamos acostumbrados a equivocarnos y no asumir las consecuencias. Pienso que las personas que se preocupan por su crecimiento personal son las que entienden que cuando cometen un error y son conscientes de él, lo menos que pueden hacer es aceptar que fallaron, porque solamente así vivirán totalmente el aprendizaje.