Fiesta de la presentacion del Senor - C

Published: Feb. 2, 2019, 2:33 p.m.

b'2 de febrero LA PRESENTACI\\xd3N DEL SE\\xd1OR Fiesta Cuando esta fiesta no cae en domingo, antes del evangelio se escoge una sola de las lecturas siguientes: \\xa0 PRIMERA LECTURA Entrar\\xe1 en el santuario el Se\\xf1or a quien vosotros busc\\xe1is Lectura de la profec\\xeda de Malaqu\\xedas 3, 1-4 As\\xed dice el Se\\xf1or: \\xabMirad, yo env\\xedo a mi mensajero, para que prepare el camino ante m\\xed. De pronto entrar\\xe1 en el santuario el Se\\xf1or a quien vosotros busc\\xe1is, el mensajero de la alianza que vosotros dese\\xe1is. Miradlo entrar \\u2014dice el Se\\xf1or de los ej\\xe9rcitos\\u2014. \\xbfQui\\xe9n podr\\xe1 resistir el d\\xeda de su venida?, \\xbfqui\\xe9n quedar\\xe1 en pie cuando aparezca? Ser\\xe1 un fuego de fundidor, una lej\\xeda de lavandero: se sentar\\xe1 como un fundidor que refina la plata, como a plata y a oro refinar\\xe1 a los hijos de Lev\\xed, y presentar\\xe1n al Se\\xf1or la ofrenda como es debido. Entonces agradar\\xe1 al Se\\xf1or la ofrenda de Jud\\xe1 y de Jerusal\\xe9n, como en los d\\xedas pasados, como en los a\\xf1os antiguos\\xbb. \\xa0 Palabra de Dios. \\xa0 Salmo responsorial: Salmo 23, 7. 8. 9. 10 (R.: 10b) R. El Se\\xf1or, Dios de los ej\\xe9rcitos, es el Rey de la gloria. \\xa1Portones!, alzad los dinteles, que se alcen las antiguas compuertas: va a entrar el Rey de la gloria. R. \\u2014\\xbfQui\\xe9n es ese Rey de la gloria? \\u2014El Se\\xf1or, h\\xe9roe valeroso; el Se\\xf1or, h\\xe9roe de la guerra. R. \\xa1Portones!, alzad los dinteles, que se alcen las antiguas compuertas: va a entrar el Rey de la gloria. R. \\u2014\\xbfQui\\xe9n es ese Rey de la gloria? \\u2014El Se\\xf1or, Dios de los ej\\xe9rcitos. \\xc9l es el Rey de la gloria. R. \\xa0 SEGUNDA LECTURA Ten\\xeda que parecerse en todo a sus hermanos Lectura de la carta a los Hebreos 2, 14-18 Los hijos de una familia son todos de la misma carne y sangre, y de nuestra carne y sangre particip\\xf3 tambi\\xe9n Jes\\xfas; as\\xed, muriendo, aniquil\\xf3 al que ten\\xeda el, poder de la muerte, es decir, al diablo, y liber\\xf3 a todos los que por miedo a la muerte pasaban la vida entera como esclavos. Notad que tiende una mano a los hijos de Abrah\\xe1n, no a los \\xe1ngeles. Por eso ten\\xeda que parecerse en todo a sus hermanos, para ser sumo sacerdote compasivo y fiel en lo que a Dios se refiere, y expiar as\\xed los pecados del pueblo. Como \\xe9l ha pasado por la prueba del dolor, puede auxiliar a los que ahora pasan por ella. Palabra de Dios. \\xa0 Aleluya Lc 2, 32 Luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel. \\xa0 EVANGELIO Mis ojos han visto a tu Salvador \\xa0Lectura del santo evangelio seg\\xfan san Lucas 2, 22-40 Cuando lleg\\xf3 el tiempo de la purificaci\\xf3n, seg\\xfan la ley de Mois\\xe9s, los padres de Jes\\xfas lo llevaron a Jerusal\\xe9n, para presentarlo al Se\\xf1or, de acuerdo con lo escrito en la ley del Se\\xf1or: \\xabTodo primog\\xe9nito var\\xf3n ser\\xe1 consagrado al Se\\xf1or\\xbb, y para entregar la oblaci\\xf3n, como dice la ley del Se\\xf1or: \\xabun par de t\\xf3rtolas o dos pichones\\xbb. Viv\\xeda entonces en Jerusal\\xe9n un hombre llamado Sime\\xf3n, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Esp\\xedritu Santo moraba en \\xe9l. Hab\\xeda recibido un or\\xe1culo del Esp\\xedritu Santo: que no ver\\xeda la muerte antes de ver al Mes\\xedas del Se\\xf1or. Impulsado por el Esp\\xedritu, fue al templo. Cuando entraban con el ni\\xf1o Jes\\xfas sus padres para cumplir con \\xe9l lo previsto por la ley, Sime\\xf3n lo tom\\xf3 en brazos y bendijo a Dios diciendo: \\u2014\\xabAhora, Se\\xf1or, seg\\xfan tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel\\xbb. Su padre y su madre estaban admirados por lo que se dec\\xeda del ni\\xf1o. Sime\\xf3n los bendijo, diciendo a Mar\\xeda, su madre: \\u2014\\xabMira, \\xe9ste est\\xe1 puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; ser\\xe1 como una bandera discutida: as\\xed quedar\\xe1 clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasar\\xe1 el alma\\xbb. Hab\\xeda tambi\\xe9n una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita hab\\xeda vivido siete a\\xf1os casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo d\\xeda y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acerc\\xe1ndose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del ni\\xf1o a todos los que aguardaban la liberaci\\xf3n de Jerusal\\xe9n. Y, cuando cumplieron todo lo que prescrib\\xeda la ley del Se\\xf1or, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El ni\\xf1o iba creciendo y robusteci\\xe9ndose, y se llenaba de sabidur\\xeda; y la gracia de Dios lo acompa\\xf1aba. Palabra del Se\\xf1or. \\xa0 O bien m\\xe1s breve: \\xa0 Lectura del santo evangelio seg\\xfan san Lucas 2, 22-32 Cuando lleg\\xf3 el tiempo de la purificaci\\xf3n, seg\\xfan la ley de Mois\\xe9s, los padres de Jes\\xfas lo llevaron a Jerusal\\xe9n, para presentarlo al Se\\xf1or, de acuerdo con lo escrito en la ley del Se\\xf1or: \\xabTodo primog\\xe9nito var\\xf3n ser\\xe1 consagrado al Se\\xf1or\\xbb, y para entregar la oblaci\\xf3n, como dice la ley del Se\\xf1or: \\xabun par de t\\xf3rtolas o dos pichones\\xbb. Viv\\xeda entonces en Jerusal\\xe9n un hombre llamado Sime\\xf3n, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Esp\\xedritu Santo moraba en \\xe9l. Hab\\xeda recibido un or\\xe1culo del Esp\\xedritu Santo: que no ver\\xeda la muerte antes de ver al Mes\\xedas del Se\\xf1or. Impulsado por el Esp\\xedritu, fue al templo. Cuando entraban con el ni\\xf1o Jes\\xfas sus padres para cumplir con \\xe9l lo previsto por la ley, Sime\\xf3n lo tom\\xf3 en brazos y bendijo a Dios diciendo: \\u2014\\xabAhora, Se\\xf1or, seg\\xfan tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel\\xbb. Palabra del Se\\xf1or.'