Lo que cuesta seguir a Cristo

Published: Oct. 16, 2006, 4 a.m.

b'Lucas 14:25-35 (Reina-Valera 1960)
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\\n25 Grandes multitudes iban con \\xe9l; y volvi\\xe9ndose, les dijo:
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\\n26 Si alguno viene a m\\xed, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun tambi\\xe9n su propia vida, no puede ser mi disc\\xedpulo.
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\\n27 Y el que no lleva su cruz y viene en pos de m\\xed, no puede ser mi disc\\xedpulo.
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\\n28 Porque \\xbfqui\\xe9n de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?
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\\n29 No sea que despu\\xe9s que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a hacer burla de \\xe9l,
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\\n30 diciendo: Este hombre comenz\\xf3 a edificar, y no pudo acabar.
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\\n31 \\xbfO qu\\xe9 rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra \\xe9l con veinte mil?
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\\n32 Y si no puede, cuando el otro est\\xe1 todav\\xeda lejos, le env\\xeda una embajada y le pide condiciones de paz.
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\\n33 As\\xed, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi disc\\xedpulo.
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\\n34 Buena es la sal; mas si la sal se hiciere ins\\xedpida, \\xbfcon qu\\xe9 se sazonar\\xe1?
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\\n35 Ni para la tierra ni para el muladar es \\xfatil; la arrojan fuera. El que tiene o\\xeddos para o\\xedr, oiga.'