Dos días y parece que son más, porque estamos cada vez más en un tiempo comprimido que en el que al no pasar nada, se congregan las cosas en un supuesto segundo plano -primero en realidad pero no visible- y entonces llegará un momento en el que se sucederán los actos que den sentido a todo lo trascendente, pero sin saber específicamente en el tiempo lineal CUÁNDO.