'Putin', por Xoán Tallón

Published: July 4, 2020, 10:33 a.m.

No es fácil ser Vladimir Putin. Te pasas el día calculando tu poder, para a lo mejor llegar a la conclusión de que tienes mucho, pero aún no todo. Normal que te desanimes. ¿Toda la vida matándote para eso? Entiendo que reforme la constitución de su país para seguir gobernando hasta 2036. Cuando eres poderoso, haces cosas de poderosos. Las haces porque puedes. No importa si no necesitas hacerlas, te salen, como el día que aquel futbolista conducía su Maserati con 25.000 libras en el asiento del pasajero. Cuando le dieron el alto unos policías y le preguntaron por qué llevaba todo ese dinero en efectivo, simplemente dijo: «es que soy rico». En el trabajo de Putin no puedes ser, digamos, poderoso y punto. Qué autocomplacencia más innecesaria. Tienes que ser continuamente más poderoso, o de lo contrario lo será otro por ti. Ahora bien, ser poderosísimo tal vez te aboque a un punto de no retorno. Llegada la hora, imagino a Putin agobiado porque no sabe cómo dejar de ser presidente. Estará tan enredado en el puesto que le será imposible huir, lo que lo llevará a preguntarse «¿Pero qué clase de poder de mierda tengo?»