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TIEMPO DE DESAFIOS CON JORGE RUSELER, MIGUEL ANGEL BRODA, MARIA O DONNEL SINTESIS Y PANORAMA DE BLOOMBERG.

La Argentina se encuentra transitando un proceso de destrucci\\xf3n definitiva de su moneda. El peso argentino cada vez vale menos y el rechazo por el mismo es cada vez mayor. En este contexto, el gobierno anunciar\\xe1 oficialmente en algunos d\\xedas m\\xe1s la creaci\\xf3n de nuevos billetes. De a poco le iremos diciendo adi\\xf3s a los diferentes animales que hoy posan en buena parte de nuestro papel moneda: el guanaco en el billete de $20, el c\\xf3ndor en el de $50, la taruca en el de $100, la ballena franca austral en el de $200, el yaguaret\\xe9 en el de $500 y el hornero en el de $1.000.

La idea en danza es la de eliminar paulatinamente los \\u201canimalitos\\u201d coloridos de los billetes y reemplazarlos por pr\\xf3ceres (como lo fue desde la creaci\\xf3n del peso argentino en 1992). Hasta la ideolog\\xeda de g\\xe9nero se ha inmiscuido en el debate por las nuevas figuras dando paso a la paridad de g\\xe9nero en la nueva serie de billetes que se viene: se incorporar\\xe1n mujeres al papel moneda y ya no solo ser\\xe1n los pr\\xf3ceres los \\xfanicos protagonistas.

Es realmente incre\\xedble que este anuncio se realice en un contexto donde el peso argentino se encuentra pr\\xe1cticamente en estado vegetativo. La evoluci\\xf3n de la cantidad de billetes durante los \\xfaltimos 30 a\\xf1os ha sido incre\\xedble. La emisi\\xf3n monetaria utilizada para solventar la maquinaria populista ha sido letal. En 1992 (a\\xf1o en que se le da impresi\\xf3n a los primeros billetes que reemplazaron a los tambi\\xe9n ca\\xeddos en desgracia \\u201cAustrales\\u201d) la cantidad de billetes de $10 en circulaci\\xf3n era de 5 millones de unidades. En aquel tiempo 10 pesos equival\\xedan a 10 d\\xf3lares: hoy es nuestro billete de menor denominaci\\xf3n, equivale a apenas 4,5 centavos de d\\xf3lar y ya no son 5 millones los billetes que est\\xe1n circulando, sino que los mismos ascienden a 539 millones de unidades (m\\xe1s otras 200 millones de unidades en circulaci\\xf3n en forma de monedas). Lo mismo ocurri\\xf3 con cada uno de los billetes: del billete de $100 (100 d\\xf3lares en 1992) se imprimieron por aquel entonces un total de 200.000 unidades. Hoy circulan entre nosotros 2.399 millones de unidades de $100 (la cantidad se multiplic\\xf3 unas 12.000 veces). Por \\xfaltimo el billete de $1.000: el querido hornero vio la luz por primera vez con un total de 19.400.000 unidades all\\xe1 por Diciembre de 2017. Hoy a los horneros se los puede encontrar en 1.697 millones de billetes. El nivel de impresi\\xf3n ha sido astron\\xf3mico.

Cuando la moneda actual naci\\xf3 hace 30 a\\xf1os, con el billete de mayor denominaci\\xf3n (el de $100) se pod\\xedan comprar: 100 d\\xf3lares, 30 kilos de asado, 200 litros de leche y 100 botellas de cerveza. Hoy con esos mismos 100 pesos se pueden comprar: 4,5 centavos de d\\xf3lar, 120 gramos de asado, un litro de leche y una latita de cerveza. La destrucci\\xf3n de la moneda es total.

Por desgracia, la pol\\xedtica est\\xe1 de espaldas a la realidad es absolutamente todos los temas, incluso en las cuestiones m\\xe1s peque\\xf1as. Estamos viendo el fin del peso argentino. Lo que antes era un billete hoy es apenas una nada, que ya nadie est\\xe1 dispuesto a tener encima. Este es el fin de una moneda que tuvo la extra\\xf1eza de darnos 10 a\\xf1os de estabilidad y 13.500% de inflaci\\xf3n. Fin.

MANUEL ADORNI