#186. Herramientas de productividad para opositores 2: la organización y objetivos semanales.
Si necesitas compaginar el estudio de tu oposición con el trabajo a turnos, este episodio es uno de los que puede encaminarte en la senda de la organización personal. No todas las herramientas que van a hacer que mejore tu productividad personal al preparar tu OPE son apps. También son hábitos o costumbres. En este caso la herramienta en la que creo firmemente para mejorar tu productividad es la organización semanal. Además te puede ser muy beneficiosa si te ocurre alguna de las siguientes situaciones: al final de la semana no tienes sensación de haber progresado. te acuestas con muchas cosas “en la cabeza”. si te pasas el día haciendo cosas, esforzándote pero con la sensación de no haber logrado ir hacia ningún lado. ¿En qué consiste la organización semanal para un opositor? Repito, si tienes que compaginar el estudio de un abultado temario de oposición con un trabajo y obligaciones familiares la organización semanal es fundamental. Es como una brújula. Tienes una gran capacidad y te vas a esforzar muchísimo. Pero si no lo haces con un rumbo vas a amplificar tus resultados. Aunque voy a darte más detalles en unos renglones más, debes saber que es un hábito sencillo de ejecutar. Difícil de mantener, eso sí. Nunca debes confiarte. Siempre debes hacerlo. Pertenece al grupo de hábitos de control. Esos hábitos que te permiten conocer la situación en la que estás y que evita la desorientación. Se basa en generar un espacio de recogida de información y reflexión acerca de cómo han ido las cosas a lo largo de la semana. Se analiza qué has proyectado, y qué has cumplido. Se extraen conclusiones y se programa la siguiente semana. Cómo organizar la semana. La primera semana, simplemente harás la previsión sin análisis. No es recomendable analizar sin proyección previa. Porque es esencial que identifiques si lo que proyectas es realista. El orden de las acciones puede variar según quien lo diga, mi recomendación es: en primer lugar escoger el objetivo de estudio semanal. Una vez que se ha determinado (por ejemplo “estudiar el tema 19”) se descompone en tareas. Si el tema 19 tiene 30 páginas, podemos descomponerlo en 3 horas de lectura (con subrayado) 9 horas de estudio memorístico y 1 de esquematización final… más o menos. Estas tareas tal cual no son el objetivo del episodio de hoy. una vez que tenemos los objetivos de estudio semanal (13 horas aproximadas) se debe conformar el calendario. En primer lugar se marcan las zonas de trabajo y obligaciones familiares insalvables. Con estos huecos, puedes asignar las zonas de estudio. al asignar los huecos de estudio, te recomiendo seguir estas premisas. no rellenes todos los huecos de estudio. Probablemente tengas en una semana 30-40 horas “libres” pero no son reales. Hay que comer, ducharse, hablar con tu familia, etc… los imprevistos ocurren. Deja espacios en tu agenda para tener más flexibilidad. esto funciona mejor con check-in y check-out diarios (lo veremos en otro episodio). Una observación más. Es mucho mejor (pero mucho) planificar la semana y controlar qué se ha cumplido, aunque se haya cumplido poco, a hacer todo en una supuesta “perfección” sin valorar qué se ha hecho. Y cómo ha ido…. … esa es la base de la mejora continua.