Presidente sin partido, partido sin dirigencia

Published: Oct. 27, 2020, 6:13 a.m.

Finalmente el INE, es decir, el Estado Mexicano a través de una de sus instituciones, logró lo que Morena como partido no pudo: elegirle un presidente, pendiente desde 2018. A la licencia de Andrés Manuel López Obrador como dirigente nacional de Morena para irse de candidato presidencial, el 12 de diciembre de 2017, dejó a Yeidkol Polevnsky, secretaria general de su CEN, como cabeza del partido. Pero en el caos interno por los intereses, el presupuesto y las tribus, nunca pudieron resolver el relevo de su dirigencia. Siendo Morena lo que es, fueron necesarias tres encuestas del INE, el método propuesto por López Obrador, para llegar finalmente a Mario Delgado. La primera encuesta fue de reconocimiento de los aspirantes, lista a la que se apuntaron más de un centenar y que ganó ampliamente Porfirio Muñoz Ledo. Luego de esta purga, quedaron tres pero en la decisiva empataron éste y Delgado por lo que fueron a la vencida en la que salió primero el presidente de la JUCOPO de la Cámara de Diputados, lo que su veterano opositor desconoció. El hecho es que Morena sigue siendo el desbarajuste que diagnosticó López Obrador hace unos días y que ya antes, el 28 de agosto, había amenazado con dejar y cambiarle de nombre y llegó a decir que era mucho pueblo para tan pocos dirigentes. Y es que el partido es él, Morena sin López Obrador es la nada que hoy representa el PRD. Lo que Mario Delgado tiene es un cargo, no un partido político, movimiento que recibe dividido, más aún con su arribo. Lo más importante que está pasando en México y en el mundo minuto a minuto. Cobertura total en López-Dóriga Digital. Visítame en: https://lopezdoriga.com/ Sígueme en todas mis redes: Twitter: https://twitter.com/lopezdoriga Facebook: https://www.facebook.com/JoaquinLopezDoriga/ Instagram: https://www.instagram.com/lopezdoriga/ Spotify: https://spoti.fi/2FC1FdH