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El Frente Amplio cerró filas ayer detrás de la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, luego de que el viernes los ediles de la oposición aprobaran en la Junta Departamental el inicio de un juicio político contra ella. Los 13 ediles blancos y colorados que impulsaron entienden que Cosse violó la Constitución al no concurrir a la junta en reiteradas oportunidades en las que fue llamada a sala, y no responder en tiempo y forma los pedidos de informes. El edil nacionalista Javier Barrios Bove, que impulsó el juico político, sostuvo ayer temprano, aquí, En Perspectiva, que la oposición no tuvo otra alternativa ya que que Cosse viene “subestimando a la Junta Departamental y los mecanismos de contralor”. «Llevo 10 años en la Junta Departamental. Pasé por tres administraciones frenteamplistas. El relacionamiento entre el ejecutivo y el legislativo (a nivel departamental) nunca ha sido peor. Es más, hoy casi no hay relacionamiento». En la tarde, luego de la reunión de la Mesa Política del Frente Amplio, el presidente de la coalición, Fernando Pereira, declaró que el planteo de juicio político “es humo de baja calidad” para distraer sobre otros asuntos en los que el gobierno no está bien parado. “Imagínense que todos los que tuvieran un tercio de los ediles en un departamento hicieran juicio político porque el intendente no va o porque nombra a todos los cargos a dedo o, como ha pasado, por hechos por lo menos reñidos con la ética. Esto no ha pasado porque Uruguay tiene una tradición democrática de cuidar su institucionalidad. Cuando los ediles perforan ese cuidado estamos en un límite muy delgado”, apuntó Pereira. Ahora será el Senado quien resuelva si el juicio político prospera. Para eso se requieren dos tercios de votos, que no se alcanzarían sin el apoyo del FA. Conversamos En Perspectiva con la intendenta Carolina Cosse, para conversar sobre este choque político de las últimas horas.