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Pedro Salinas

(Madrid, 1891 - Boston, 1951) Poeta espa\\xf1ol, miembro de la Generaci\\xf3n del 27, en la que destac\\xf3 como poeta del amor. Profundo intelectual y humanista, Pedro Salinas estudi\\xf3 las carreras de derecho y de filosof\\xeda y letras. Fue lector de espa\\xf1ol en la Universidad de Par\\xeds entre 1914 y 1917, a\\xf1o en que se doctor\\xf3 en letras.

Pedro Salinas

En la d\\xe9cada de 1920 comenz\\xf3 una asidua colaboraci\\xf3n con la Revista de Occidente y fue catedr\\xe1tico de lengua y literatura espa\\xf1olas en las universidades de Sevilla y Murcia. Trabaj\\xf3 como lector de espa\\xf1ol en Cambridge. Junto a Guillermo de Torre dirigi\\xf3 la revista \\xcdndice literario (1932-1936). En este \\xfaltimo a\\xf1o emigr\\xf3 a Estados Unidos, donde se desempe\\xf1\\xf3 como profesor en distintas universidades, y all\\xed vivi\\xf3 hasta su muerte, salvo algunos per\\xedodos en que dict\\xf3 clases en la Universidad de San Juan de Puerto Rico.

Poeta subjetivo, heredero de la tradici\\xf3n amorosa de Garcilaso de la Vega y de Gustavo Adolfo B\\xe9cquer, el gran tema de su poes\\xeda fue el amor, a trav\\xe9s del cual matiz\\xf3 y recre\\xf3 la realidad y los objetos. En su producci\\xf3n se pueden distinguir tres etapas. La primera se inscribe en la corriente de la \\xabpoes\\xeda pura\\xbb, influida por Juan Ram\\xf3n Jim\\xe9nez, que caracteriz\\xf3 tambi\\xe9n los comienzos de muchos de sus compa\\xf1eros de generaci\\xf3n, como Jorge Guill\\xe9n, Vicente Aleixandre, D\\xe1maso Alonso, Federico Garc\\xeda Lorca o Rafael Alberti. Abarca desde sus primeros versos hasta 1931, e incluye los poemarios Presagios (1924), Seguro azar (1929) y F\\xe1bula y signo (1931).

La segunda alcanza hasta 1939 y fue la de la poes\\xeda genuinamente amorosa, fruto de su apasionada relaci\\xf3n con la profesora norteamericana Katherine Whitmore. En ella celebra el amor que da sentido al mundo; la amada es una criatura concreta, en un espacio cotidiano, con la que el poeta mantiene un coloquio continuo. El amor de su l\\xedrica no es atormentado y sufrido; es una fuerza prodigiosa que da sentido a la vida (La voz a ti debida, 1933; Raz\\xf3n de amor, 1936; y Largo lamento, 1939).

Las obras de esta etapa se nutren de una l\\xedrica en segunda persona, vocativa, dirigida a la imagen de la amada, envuelta en las circunstancias externas de la vida actual: relojes, tel\\xe9fonos, playas, calles, publicidad, autom\\xf3viles y calendarios aparecen en tal poes\\xeda cambiados y transfigurados. La mujer es vista en una perspectiva de proximidad, como una amiga que se convierte en amada al contemplarse reflejada en el "espejo ardiente" que el amor le ofrece. Tal actividad po\\xe9tica, en la que se utilizan elementos m\\xe9tricos muy tenues y leves (metros cortos, con asonancias de una gran flexibilidad, que subrayan el ritmo interno de las met\\xe1foras, las ideas y la fluida elocuci\\xf3n), halla su mejor representaci\\xf3n en La voz a ti debida, obra que ha influido profundamente en la poes\\xeda espa\\xf1ola.

Tomado de: Fern\\xe1ndez, Tom\\xe1s y Tamaro, Elena. \\xabBiograf\\xeda de Pedro Salinas\\xbb. En Biograf\\xedas y Vidas. La enciclopedia biogr\\xe1fica en l\\xednea [Internet]. Barcelona, Espa\\xf1a, 2004. Disponible en https://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/salinas_pedro.htm [fecha de acceso: 19 de diciembre de 2021].