Emperadores, senadores, esclavos, persecuciones de cristianos y, sobre todo, grandes músicos que se inspiraron en el Imperio Romano para componer auténticas obras maestras, en concreto: La caída del imperio romano, Julio César, Espartaco, Cleopatra, Quo Vadis, Ben-Hur, Gladiator, Rey de Reyes, La túnica sagrada, Ben-Hur (1925).