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b'“Corri\\xf3 la voz de que por el malec\\xf3n se hab\\xeda visto pasear a un nuevo personaje: La dama del perrito. Dmitrii Dmitrich Gurov, residente en Yalta hac\\xeda dos semanas y habituado ya a aquella vida, empezaba tambi\\xe9n a interesarse por las caras nuevas. Desde El Pabell\\xf3n Verne, en que sol\\xeda sentarse, ve\\xeda pasar a una dama joven, de mediana estatura, rubia y tocada con una boina. Tras ella corr\\xeda un blanco lul\\xfa”.\\n\\nFragmento de “La dama del perrito”, de ANT\\xd3N CH\\xc9JOV. Un maestro del cuento y del teatro.\\n\\nAnt\\xf3n P\\xe1vlovich Ch\\xe9jov naci\\xf3 el 29 de enero de 1.860, en Taganrog, a orillas del mar de Azov. Su padre ten\\xeda una tienda de comestibles que quebr\\xf3 y le llev\\xf3 a la ruina. En 1.876, huyendo de los acreedores, se instal\\xf3 con su familia en Mosc\\xfa. En Taganrog qued\\xf3 \\xfanicamente Ant\\xf3n, el cuarto de seis hermanos y mientras terminaba el bachillerato, malvend\\xeda los restos del patrimonio para que la familia pudiera sobrevivir en Mosc\\xfa. Para costear su propia manutenci\\xf3n, Ch\\xe9jov daba clases particulares. En 1.879 se reuni\\xf3 con su familia para estudiar medicina y encontr\\xf3 a los suyos en una deplorable situaci\\xf3n: habitaban en un s\\xf3tano, los dos hermanos mayores viv\\xedan aparte y se hab\\xedan entregado a la bebida. Desde entonces y hasta el final de sus d\\xedas, Ant\\xf3n Ch\\xe9jov tendr\\xeda que mantener a su familia. Durante sus estudios colabor\\xf3 en revistas de humor. Se trataba de relatos vinculados a un tipo de humor tradicional en esta clase de publicaciones. Al terminar los estudios en 1.884, Ch\\xe9jov ejerci\\xf3 la medicina en diversos hospitales de la provincia de Mosc\\xfa y continu\\xf3 escribiendo y es indudable que el trabajo como humorista de aquella primera \\xe9poca constituy\\xf3 para \\xe9l un excelente aprendizaje. Ya por entonces el escritor formul\\xf3 lo que siempre ser\\xeda su credo: > y >. En 1.888 publica “La estepa”, donde evoca sus recuerdos infantiles, y el autor inicia la exaltaci\\xf3n del cuento, g\\xe9nero que elevar\\xe1 a la categor\\xeda de gran literatura. Y pese a que la trayectoria de su arte fue siempre en ascenso hasta alcanzar el virtuosismo, los personajes que llenan sus relatos son bastante semejantes; viven una realidad gris, sin horizontes, y casi siempre esta realidad es independiente de su condici\\xf3n social. Apenas se distinguen por su mayor o menor capacidad para aceptar el tedio de su existencia.\\n\\nUno de estos personajes, s\\xedmbolo de muchos otros, es el viejo profesor, protagonista de “Una historia tediosa” de 1.889, que lo ha tenido todo: el talento, el prestigio, el amor, y a qui\\xe9n su ahijada Katia le pide consejo sobre la manera de conseguir la dicha. Pero resulta que el profesor no tiene la respuesta. \\xc9l tampoco sabe para qu\\xe9 ha vivido. Le ha faltado la idea general que otorgue sentido a su dise\\xf1o vital. La cr\\xedtica personaliz\\xf3 el asunto de este cuento y lo aprovech\\xf3 para atacarle. Lo acusaron, sobre todo los populistas, de indiferencia pol\\xedtica, de renuncia al compromiso social. En 1.892 Ch\\xe9jov adquiere la finca M\\xe9lijovo, al sur de Mosc\\xfa. Un lugar tranquilo, rodeado de bosques, que le brind\\xf3 la paz que buscaba para escribir, y donde reuni\\xf3 a sus amigos en agradables tertulias. Tambi\\xe9n, como era tradicional en los propietarios rurales liberales, el autor desarroll\\xf3 una gran actividad cultural, prest\\xf3 ayuda m\\xe9dica gratuita a la poblaci\\xf3n campesina, edific\\xf3 escuelas y cre\\xf3 bibliotecas bien dotadas. En este retiro la obra de Ch\\xe9jov alcanza la plenitud art\\xedstica. Los relatos de este periodo tienen como protagonistas a hombres de nobles aspiraciones que, a medida que pasan los a\\xf1os, van corrompi\\xe9ndose debido al ambiente provinciano en que est\\xe1n sumergidos, hasta degradarse totalmente. Esta visi\\xf3n desesperada de una realidad triste, para que el escritor no ofrece soluciones, motiv\\xf3 las reiteradas acusaciones de indiferencia pol\\xedtica. Mas precisamente esa falta de compromiso con las m\\xfaltiples corrientes pol\\xedticas le permiti\\xf3 ser totalmente libre y meridiano en sus cr\\xedticas, dirigidas muy especialmente contra las ideas m\\xe1s aceptadas por los intelectuales de la \\xe9poca. Bajo ese prisma habr\\xeda que examinar los cuentos de la d\\xe9cada de 1.890. Resulta significativo lo que dice el protagonista del “Relato de un hombre desconocido”: > A esas preguntas, los personajes de Ch\\xe9jov no ofrecen respuestas. Son conscientes de una prematura vejez espiritual y saben que han llevado una existencia falsa e irracional, que su paso por la tierra carece de grandeza, pero no encuentran fuerzas para eludir el destino.\\n\\nA modo de ejemplo, se pueden extraer de la ingente obra chejoviana algunos de sus cuentos en los que se encuentra latente la idea de que el hombre compra su felicidad mediante la p\\xe9rdida de la inocencia, con la degradaci\\xf3n intelectual y moral, como “La casa con mansarda”, “El hombre enfundado” o “La grosella espina”. El tono de sus relatos no descubre llagas, sino m\\xe1s bien se vuelve testimonio de males difusos, que lo envuelve todo en una atm\\xf3sfera emotiva que, al fin de cuentas, se convierte en sin\\xf3nimo de vida. Se podr\\xeda decir que la dramaturgia de Ch\\xe9jov es una prolongaci\\xf3n natural de su prosa. El autor comenz\\xf3 a escribir obras dram\\xe1ticas muy temprano, incluso antes que cuentos, con dramas de su adolescencia que se conocen por referencias y luego, entre 1.885 a 1.895, con obras de corte humor\\xedstico. En estos vodeviles Ch\\xe9jov alcanza toda su expresividad, pero su importancia queda muy por debajo de sus dramas, los cuales para el teatro mundial tuvieron un efecto renovador. La dramaturgia anterior a Ch\\xe9jov se caracteriza por colocar en el centro de la trama un acontecimiento o un personaje en torno al cual se sit\\xfaan, a mayor o menor distancia, los dem\\xe1s participantes. Al final, en el desenlace, se aclaran todas las circunstancias que motivaron la obra. Por el contrario, Ch\\xe9jov lleva al teatro un tipo de asuntos m\\xe1s propio de la novela que del drama tradicional, por ejemplo todos los aspectos de la vida cotidiana rechazados por la vieja dramaturgia, que establec\\xeda una rigurosa diferencia entre lo dram\\xe1tico y lo no dram\\xe1tico. En el teatro del autor, la acci\\xf3n no es determinante para el destino del personaje. Las situaciones que se producen en el escenario forman parte del drama, pero no son todo el drama, ya que lo dram\\xe1tico est\\xe1 en todo. El hombre no se halla en conflicto con los dem\\xe1s personajes, sino, en primer lugar consigo mismo y con el mundo que le rodea dentro y fuera del escenario. Del mismo modo las desdichas que padecen sus criaturas no son causadas por un personaje malvado, sino por las poderosas fuerzas que dominan al hombre y a la sociedad y que no tienen nombre propio. De Ch\\xe9jov puede afirmarse que es m\\xe1s teatral que los autores antiguos, porque en lugar de destruir lo dram\\xe1tico, como se le acusaba, lo extiende a todos los aspectos de la vida humana, incluso aquellos que la dramaturgia anterior no consideraba dram\\xe1ticos. Como el conflicto se dilucida no s\\xf3lo en el escenario, no s\\xf3lo en el choque entre los personajes de la obra, da la impresi\\xf3n de que este tipo de teatro no tiene desenlace ni intriga. Los personajes creados por Ch\\xe9jov sufren de una cierta alienaci\\xf3n, pues se hallan separados entre s\\xed por tabiques invisibles; cada uno sumergido en su propio estado de \\xe1nimo. De ah\\xed que las replicas que intercambian parezcan casuales y sus di\\xe1logos se manifiesten como mon\\xf3logos. Aunque todos se reconocen porque est\\xe1n envueltos en una atm\\xf3sfera l\\xedrica com\\xfan, que es la que los une.\\n\\nEn el drama “Iv\\xe1nov” de 1.889, la acci\\xf3n se desarrolla en una ciudad de provincias, en medio de la nobleza parasitaria, de \\xednfimos intereses. Los dos personajes principales, los intelectuales Iv\\xe1nov y Lvov, representan, cada uno a su manera, la degradaci\\xf3n de los ideales del movimiento populista. Iv\\xe1nov, un hombre de sentimientos nobles, est\\xe1 de vuelta de todo, cansado por el ambiente mezquino que le rodea. Su antagonista, Lvov, s\\xf3lo conserva del esp\\xedritu juvenil las frases hechas; sigue jurando demag\\xf3gicamente su fidelidad a los viejos ideales, que ha rebajado a su peque\\xf1o entendimiento y convertido en una futilidad. A este primer intento de dramaturgia le sigue una etapa en la que el escritor se dedica de lleno a la prosa. En 1.896 retorna al teatro con “La gaviota”. “La gaviota” se desarrolla en una finca en la que descansa la actriz Arkadina, famosa, aunque ya en declive, con su amante Trigorin, un renombrado escritor. El hijo de Arkadina, Konstant\\xedn, dramaturgo principiante, est\\xe1 enamorado de Nina Zar\\xe9chnaia, una joven que sue\\xf1a con ser actriz. Por su parte, \\xe9sta se enamora de Trigorin y se fuga con \\xe9l. Kontanst\\xedn se suicida. La gaviota es un s\\xedmbolo presente en toda la obra, aunque se presta a distintas interpretaciones: es representaci\\xf3n del arte puro y valiente y a la vez expresi\\xf3n del amor herido y tr\\xe1gico. Finalmente el p\\xe1jaro abatido simboliza el arte muerto y falto de inspiraci\\xf3n. La historia esc\\xe9nica de “La gaviota” result\\xf3 muy accidentada. Su estreno en San Petersburgo constituy\\xf3 un fracaso total. La obra fue acogida con silbidos y pataleos del p\\xfablico. Ch\\xe9jov, presente en la sala, escribi\\xf3 despu\\xe9s del espect\\xe1culo: >. Pese al humor de esta palabras, lo cierto es que el fracaso afect\\xf3 seriamente al autor, cuya tisis se agrav\\xf3 a\\xfan m\\xe1s. Dos a\\xf1os m\\xe1s tarde, en 1.898, dos j\\xf3venes realizadores de Mosc\\xfa, Stanislavski y Remir\\xf3vich-D\\xe1nchenko, que poco tiempo atr\\xe1s hab\\xedan inaugurado el Teatro del Arte, lograron con mucho esfuerzo el permiso de Ch\\xe9jov para reponer “La gaviota”. El papel de Arkadina lo interpretaba la joven actriz Olga Kn\\xedpper, que en 1.901 se convertir\\xeda en la esposa de Ch\\xe9jov. El espect\\xe1culo obtuvo un \\xe9xito clamoroso y desde entonces el nombre de Ch\\xe9jov qued\\xf3 ligado para siempre al de Stanislavski. La gaviota con las alas extendidas en vuelo se convirti\\xf3 en el emblema del Teatro del Arte de Mosc\\xfa. \\n\\nEl protagonista de “T\\xedo Vania” de 1.897 es Iv\\xe1n Voinitski, un hombre que ha estado el servicio del profesor Serebri\\xe1kov. Como se cree mediocre, ha sacrificado su vida para que Serebri\\xe1kov pueda ofrecer toda su sabidur\\xeda al mundo. Pero a los veinticinco a\\xf1os de entrega abnegada, el t\\xedo Vania cae en la cuenta de que el profesor es un hombre vulgar, est\\xf3lido y ego\\xedsta. Tras ese instante de lucidez y su estallido de protesta, Vania vuelve a su labor cotidiana, ahora sabiendo que su vida no tiene sentido y que debe vivirla sin hacerse ninguna ilusi\\xf3n, como un castigo. El mismo conflicto de las aspiraciones truncadas se halla presente en la obra “Las tres hermanas”. Olga, Masha e Irina viven en una ciudad provinciana en la que todo es mezquino y vulgar. Los seres que la habitan >, se dice en la obra. Las tres hermanas sue\\xf1an con Mosc\\xfa, donde estar\\xe1n a salvo de la vida vulgar y en donde ser\\xe1n felices. Su exclamaci\\xf3n > se convierte en s\\xedmbolo de una nueva vida, llena de inter\\xe9s y de sentido. Toman el t\\xe9, hacen solitarios, tocan el piano, hablan de temas elevados y tambi\\xe9n de las cosas cotidianas. En la superficie de la obra no ocurre nada. Pero dentro de cada personaje nacen y mueren las esperanzas, transcurre una vida interior intensa. La siguiente y \\xfaltima obra dram\\xe1tica, “El jard\\xedn de los cerezos” de 1.903, es una de las m\\xe1s enigm\\xe1ticas de Ch\\xe9jov. Los elementos sat\\xedricos fundidos con los l\\xedricos en el mismo contexto, impiden una interpretaci\\xf3n un\\xedvoca. Reducida a su esquema m\\xe1s simple, la obra trata de la decadencia de los nidos de hidalgos y del ascenso de los hombres de empresa, los capitalistas m\\xe1s bastos y groseros, pero tambi\\xe9n m\\xe1s pr\\xe1cticos y pujantes. Una propiedad con un jard\\xedn de cerezos ha salido a subasta. Para los viejos due\\xf1os, Ran\\xe9vskaia y G\\xe1ev, el jard\\xedn ha representado todo en sus vidas. El nuevo due\\xf1o, Lopajin, quiere talarlo porque necesita el terreno para otros fines. Los personajes se agrupan de acuerdo a su actitud respecto al jard\\xedn. Para Ran\\xe9vskaia y G\\xe1ev simboliza una vida holgada y sin preocupaciones; para Lopajin, hijo y nieto de siervos, el jard\\xedn representa una etapa en su carrera ascendente hacia la riqueza y tal vez una inconsciente venganza hist\\xf3rica. El desenlace es tr\\xe1gico: al final se escuchan los hachazos que derriban los cerezos. Pero tambi\\xe9n est\\xe1n los personajes positivos, Petia Trof\\xedmov y Ania, que sue\\xf1an con una Rusia convertida entera en un jard\\xedn en flor.\\n\\nAnt\\xf3n Ch\\xe9jov pas\\xf3 los \\xfaltimos a\\xf1os de su vida en Yalta, a orillas del mar Negro, adonde se mud\\xf3 con su familia en 1.898. Un empeoramiento de su salud, unido a la muerte del padre, lo decidieron a vender la finca y hacer construir una hermosa casa en la falda de una monta\\xf1a desde la que se dominaba toda la ciudad de Yalta y el mar. All\\xed Ch\\xe9jov frecuent\\xf3 asiduamente a Tolstoi, a M\\xe1ximo Gorki y a Iv\\xe1n Bunin, las figuras literarias m\\xe1s importantes de la \\xe9poca. Sin embargo el escritor se sent\\xeda desterrado en Yalta. Su matrimonio con la actriz Olga Kn\\xedpper cambi\\xf3 muy poco su vida. Incluso hizo m\\xe1s insostenible su alejamiento de Mosc\\xfa, donde ella cosechaba triunfos esc\\xe9nicos a los que no hab\\xeda querido renunciar. En la primavera de 1.904 la salud de Ch\\xe9jov empeor\\xf3 considerablemente. Los m\\xe9dicos decidieron enviarlo al balneario alem\\xe1n de Badenweiler. No era la primera vez que viajaba a Europa. Hab\\xeda visitado Francia e Italia en una media docena de ocasiones. Amaba la cultura europea y quer\\xeda para Rusia lo mejor de lo que hab\\xeda visto en esos viajes. Ahora, cuando sal\\xeda para Badenweiler, le dijo a un amigo que le desped\\xeda en la estaci\\xf3n: >. La muerte se produjo en la estaci\\xf3n alemana el 15 de Julio de 1.904, a los cuarenta y tres a\\xf1os de edad, cuando todav\\xeda se pod\\xedan esperar de \\xe9l logros a\\xfan m\\xe1s excelentes. \\nComo dec\\xedamos hay un tema recurrente en la literatura de Ch\\xe9jov: la vida mata las ilusiones juveniles, demasiadas veces los hombres se reconocen en sus propios fracasos. Porque el tiempo pasa y la tragedia est\\xe1 en el transcurso, en la p\\xe9rdida de energ\\xedas, en el olvido del clamor y del ardor. Sin embargo una sola emoci\\xf3n le es dable saborear al hombre en su madurez y senectud: la capacidad de amar, m\\xednimamente es cierto, con dolor tambi\\xe9n, pero as\\xed y todo, como un prodigio que puede redimir cualquier rev\\xe9s. Ejemplo de esta actitud literaria y de esta tem\\xe1tica es “La dama del perrito”, escrita en 1.899 en Yalta, joya literaria en la que se ven todas las caracter\\xedsticas apuntadas antes. El relato tiene un sustrato autobiogr\\xe1fico, ya que su protagonista se encuentra en Yalta desde hace quince d\\xedas, pero su residencia habitual es Mosc\\xfa. Sabemos que Ch\\xe9jov sent\\xeda su estancia all\\xed como un destierro y que la nostalgia de Mosc\\xfa se acentu\\xf3 a medida que la enfermedad progresaba, consciente tal vez de que nunca volver\\xeda a los lugares de la felicidad. El protagonista del relato, Gurov, encuentra a Anna Sergueevna, la dama del perrito y el conocimiento de Gurov con la dama ocurre como un episodio casual. Aunque antes de que se produzca, el narrador se sustrae un momento del asunto y describe el mundo de Gurov, en el que vemos sin demasiados embozos la situaci\\xf3n real del autor: , nos dice el texto. En contraste con ella, Anna Sergueevna aparece como una suave prolongaci\\xf3n de la tristeza. Una aventura se perfila entre ambos, con las caracter\\xedstica habituales de este tipo de lances: la amistad previa, las mutuas confidencias, la … Van al hotel donde ella se hospeda, tras lo cual ella se recrimina una conducta indigna. Pero debe volver con su marido. El rom\\xe1ntico escenario de Yalta se transforma ahora en la vida cotidiana de Mosc\\xfa, donde, sin darse muy bien cuenta, se reanudan los encuentros. Los une un sentimiento m\\xednimo, casi distra\\xeddo, del que surge a los ojos del lector la verdad de un amor profundo e ireemplazable. Los ambientes que atraviesan los amantes se hallan te\\xf1idos de una tristeza infinita, oto\\xf1al, como la personalidad de esas dos criaturas cuyo sosiego s\\xf3lo se halla iluminado por los fulgores de un amor final que el narrador se empe\\xf1a en presentar como exiguo y poco importante, pero que es lo \\xfanico que poseen. Todo ba\\xf1ado por una atm\\xf3sfera de hast\\xedo y de angustia por lo cotidiano que se hace opresiva y que representa la desdicha que acecha a todo sentimiento real; el contraste entre los personajes y el medio neblinoso y opaco que los rodea convierte el relato en un canto a los poderes eternos del amor, en el homenaje postrero de un escritos a los sentimientos aut\\xe9nticos.'