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Chozas, cuadras, vertederos, kelis: nos faltan las palabras para definir a ese vórtice de caos que son los pisos de estudiantes. El Grupo aborda esta semana estos ecosistemas únicos en los que la fiesta es perpetua y no existen los horarios, y donde es más probable que te encuentres con mobiliario urbano en medio del salón que con los platos fregados.

Ni Sílvia Abril ni Toni Acosta escaparon de la vida del estudiante: una se atiborraba a endivias mientras la otra hacía la dieta del pan con mayonesa, y las dos tuvieron que lidiar con compañeros de todos los colores. Nada ha cambiado: los estudiantes siguen protegiendo sus estantes de la nevera y viviendo el clásico desenfreno y desorden que conocieron nuestras jefas. Dicen que pronto vendrán los felices años 20, así que no nos queremos ni imaginar la que está por caer en esos pisos...